La Agencia Japonesa de Exploración Aeroespacial (JAXA, por sus siglas en inglés) anunció el lunes que la pequeña sonda japonesa no tripulada que se posó en la luna recientemente pudo volver a cargar sus baterías y reanudar sus operaciones.
El Aterrizador Inteligente para la Investigación Lunar (SLIM, por sus siglas en inglés) permaneció inactivo debido a que sus células solares no lograron generar electricidad tras el alunizaje. Se cree que la dirección del sol ha cambiado, permitiendo así que las células solares de la sonda tengan acceso a la luz.
JAXA dijo que la comunicación con SLIM se recuperó alrededor de las 23:00 horas del domingo. La agencia volvió a activar la cámara de espectroscopia y comenzó a realizar una observación detallada de la composición de las rocas de la superficie lunar.
SLIM se posó cerca del cráter Shioli en la zona de Mare Nectaris, al sur del ecuador lunar, en las primeras horas del 20 de enero.
Este fue el primer alunizaje exitoso de Japón, que se convirtió en el quinto país en lograr una hazaña similar. La sonda logró el primer “aterrizaje preciso” del mundo al posarse en un lugar dentro de un radio a menos de 100 metros del objetivo en la luna.