El Gobierno de Japón anunció el martes que espera reducir la cantidad de polen en los próximos 30 años acelerando las tareas de talado de cedros, que son la fuente del polen que provoca las alergias estacionales.
El Gobierno incluyó este objetivo en un esquema de medidas para combatir las alergias. La Agencia de Silvicultura redactará los detalles del plan este año.
“La alergia es un problema social que continúa provocando sufrimiento a muchas personas”, dijo el Gobierno y añadió que es necesaria una estrategia a largo plazo para hacer frente a esta cuestión.
Japón cuenta con 4,31 millones de hectáreas de bosque con cedros plantados que generan polen. El Gobierno planea incrementar la deforestación de estos bosques de las 50.000 hectáreas al año en la actualidad hasta unas 70.000 hectáreas en 10 años.
El Gobierno promoverá asimismo la sustitución de los cedros actuales por otros que producen menos polen, y espera que estos últimos representen el 90 % de todos los cedros jóvenes en los próximos 10 años.