Una mujer en Suzhou, China, fue detenida recientemente por “provocar problemas”, según informaron los medios del país.
Su presunto crimen fue que la vieron vistiendo un kimono. La mujer estaba vestida como un personaje de manga (un cómic japonés). Arrestarla puede parecer dramático, pero aquí hay más en juego que un simple error de moda.
La ropa es un identificador cultural y, para muchos, un símbolo de identidad y orgullo nacional. Cuando piensas en el kimono, puede que pienses en Japón. Sin embargo, la prenda rara vez se usa en Japón hoy en día, excepto en festivales o celebraciones tradicionales.
Como resultado, la industria del kimono, que experimentó un auge en la década de 1980, actualmente está sufriendo una recesión masiva.
Sin embargo, el kimono que se usa en la actualidad no es un invento de los japoneses. Se remonta al siglo VII cuando la Corte Imperial comenzó a usar prendas adaptadas de los estilos chinos.
A pesar de estos orígenes chinos, el kimono es un importante símbolo cultural de Japón a nivel mundial. Y, en muchos países asiáticos, particularmente aquellos que fueron brutalmente colonizados por Japón, el kimono sigue siendo un símbolo de opresión.